
Podríamos definir a Álvaro McKenzie como un joven artista riojano de gustos eclécticos y variados.
Influenciado por la música funky y disco que escuchaba en casa, el pop que marcó su infancia y la electrónica dosmilera de su adolescencia, Álvaro decidió hace unos años pasarse al otro lado de la cabina de DJ y empezar a pinchar esa musica electrónica que tanto había bailado en los grandes templos de este género.
Tras más de una década viviendo entre Centroeuropa, Ibiza, Latinoamérica y Oriente Medio, Álvaro ha regresado a su Logroño natal, donde gestiona la agenda musical y cultural de Maldeamoresclub, siendo además uno de los fundadores de “La Fábrica de Baile” y la fiesta queer “Sin Animó de Lycra”.
Sus sesiones son contundentes y eclécticas, fluctuando entre Club House, Techno, Tech-House y Dark Disco.